A vuelo de pájaro...
No puedo sustraerme a la magia de volar y, durante el vuelo, no puedo evitar el que mi corazón se ensanche a la par del horizonte que se abre a mis ojos.
¡Qué maravillosa invención el aeroplano!... que se sostiene sobre el aire cruzando fronteras del hombre y permite la liberación del alma. En un plano espiritual, tan real como el momento de tomar estas fotografías, pude una noche cruzar el espacio liberándome de este cuerpo y pude contemplar el mar, las montañas....esas fascinantes formas gegráficas misteriosas y a la vez familiares de mi entorno físico.
Esta vez, tengo este testimonial gráfico limitado por la posición de mi asiento en el avión de "Continental" en mis vuelos de ida y vuelta Houston-Vallarta-Houston; enero 2009 sobre ese México de contrastante belleza y ese Texas de mosaicos policromados.